¿Qué es batalla de poitiers?

La Batalla de Poitiers, también conocida como la Batalla de Tours, tuvo lugar el 10 de octubre de 732 en el área de Poitiers, en lo que hoy es Francia. Fue un enfrentamiento entre el ejército franco liderado por Carlos Martel y las fuerzas islámicas dirigidas por Abd el-Rahman Al Ghafiqi.

La batalla fue parte de la expansión musulmana en Europa occidental durante la época de la dinastía omeya en el siglo VIII. Los musulmanes habían invadido la península ibérica en el año 711 y rápidamente se extendieron hacia el norte. Bajo el liderazgo de Al Ghafiqi, una fuerza de aproximadamente 20,000 a 30,000 hombres intentó expandirse aún más hacia el interior de Europa.

Carlos Martel, conocido como el "Martillo de los infieles", era el comandante del ejército franco y gobernante de facto de Francia en ese momento. Reunió un ejército de alrededor de 15,000 hombres, en su mayoría formado por infantería pesada y caballería.

La batalla comenzó cuando los musulmanes atacaron la posición francesa en una serie de asaltos. Sin embargo, Carlos Martel organizó hábilmente su ejército, formando un muro defensivo de soldados fuertemente armados. Utilizando tácticas de defensa y una posición fortificada, los francos lograron resistir los ataques musulmanes.

El combate continuó durante todo el día, y los francos comenzaron a contraatacar a medida que los musulmanes comenzaron a agotarse. Finalmente, las fuerzas de Al Ghafiqi fueron derrotadas, y él mismo murió en la batalla. Los francos persiguieron a los musulmanes derrotados y recuperaron grandes cantidades de botín.

La Batalla de Poitiers fue un punto de inflexión en la expansión musulmana en Europa occidental. Aunque los musulmanes continuaron controlando partes de la península ibérica durante varios siglos más, la derrota en Poitiers frenó su avance hacia el norte. Carlos Martel se convirtió en una figura legendaria, y su victoria se considera una de las batallas más importantes de la época medieval.

La batalla también es significativa porque marcó el comienzo de una serie de conflictos entre el mundo cristiano y el mundo musulmán en Europa durante el período conocido como la Edad Media. Además, muchos historiadores consideran que la derrota de los musulmanes en Poitiers ayudó a preservar la cultura y la identidad cristiana en Europa occidental.